Reconocimiento

Hay mañanas en las que uno, antes o después de la ducha -es un matiz intrascendente en este caso- se mira en el espejo del baño y ve a un tipo al que no reconoce. Por más que giras la cara, escrutas entre la línea de los ojos, el mentón o la frente, ves que hay piezas que reconoces, pero que no son las tuyas. Y te preguntas quién es esa persona que te busca desde el otro lado de la pared. Ese que te observa y que deberías ser tú. Pero no lo eres.

Y, una vez pasada la sorpresa incial, una vez pasado el primer miedo de comprobar cómo te contempla desnudo un extraño, te dan ganas de presentarte y, cordialmente, tenderle la mano. Te interesas por él. Sientes curiosidad. ¿Cómo será su vida? ¿A qué se dedicará? ¿Qué quiere, sueña, vive, disfruta y odia? ¿Cómo ha llegado hasta donde está? ¿Hasta dónde quiere llegar? (¿Es que acaso quiere ir a algún lado?).

Quizá lo realmente interesante es que ese reflejo que eres tú mismo, pero en realidad no eres tú, siente la misma curiosidad, la misma necesidad de conocerte. Él te mira también asustado por que tampoco se reconoce. Y se hace las mismas preguntas. Las mismas que deberías saber contestar. Las mismas preguntas para las que tienes respuestas para cualquiera, pero no para ti.

Hoy es uno de esos días en los que no me reconozco. En los que uno se vuelve un poco loco buscando un poco de cordura. En los que no sabes qué es real y qué no lo es.

Si quieres un consejo, toma nota: si alguna vez tienes la seguridad de que algo es verdadero, agárralo fuerte, sal corriendo y no dudes jamás de tu decisión.

Peste de día

Hoy vuelta al dique seco. Tocaba nadar y no he podido ir. Mañana intentaré ir a la hora de la comida y correr los 80 minutos que tocan por la tarde. Ayer cayeron 1500 metros de piscina seguidos.

Mucho curro, mal rollo.

De Puta Madre

Perdón por la expresión, pero es lo que hay. Me siento de puta madre (deportivamente hablando). Ya sé que hay máquinas que se meten entre pecho y espalda una temeridad de metros, kilómetros, intensidades y demás historias. Yo no puedo, qué le vamos a hacer. Tengo este cuerpo serrano y el tiempo que me conceden las obligaciones. Y no pasa nada, está asumido. Pero cuando cumplo, me siento bien.

Esta semana ha sido la primera desde que me entrena Pablo (incluso teniendo en cuenta el grupo de entrenamiento del Aguaverde de la temporada pasada) que cumplo al 100% con el número de entrenamientos de la semana (ojo, no digo que haya completado las cantidades de horas o kilómetros, sino las sesiones). Antes veía lo que se avecinaba y pensaba en cuántos días iba a petar por cansancio. Ahora he sido capaz de encajarlo todo para no saltarme ni uno. Vamos por el buen camino.

El fin de semana ha sido de traca. El viernes tenía dos horas de bici que, debido a la lluvia, se quedó en 1h 15min de rodillo. El sábado nadé 2000 metros, que tocaban el jueves y que no pude hacer por culpa del curro, luego corrí 1 hora y luego 1h y 45 minutos de bici. Todo seguido. Hoy, lloviendo y con viento, han caído 2h 20min de bici y luego media hora de carrera. Insisto en que esto no es nada para los machacas, pero para mi supone una carga de pilas de la hostia. (Eso sí, estoy un pelín cansado).

La salida de bici de hoy ha sido de las que cargan la moral. Pensaba salir por la Casa de Campo, resguardado del viento, pero Zubi me ha vuelto a convencer para dejarnos caer por el Carril bici de Colmenar hasta Manzanares y vuelta. Llevaba las patas tocadas de ayer, pero ya lloro menos cada día. Nos ha llovido bastante y hemos llegado calados al coche, pero estos días son los que suman doble. Luego la carrera ha sido un suplicio. Tocaban 40 minutos y no he podido hacer más de 30 con 2 paradas de unos segundos para que volviera a llegar la sangre a la cabeza. Mucho viento que me dejaba seco y me levantaba las pulsaciones, pero no han podido conmigo. De puta madre, insisto.

Hace unas semanas estaba acojonado por que Lisboa está a la vuelta de la esquina. Ahora sé que, si sigo así, entrar en meta entero es pan comido. Allí estaremos unos cuantos amigos pasándolo bien en Mayo.

Hoy no tengo muchas más fuerzas para escribir, pero tengo que decir bien claro que cuando cruce la meta de Austria hay tres personas que serán bastante culpables: Pablo, mi entrenador, que me coloca entrenamientos que te curten o te matan :o) Zubi, que me empuja para salir y dar un poco más en la bici y me espera cuando que quedo tirado (que todavía son muchas veces) -gracias amigo- y mi MUJER, que me anima cada día a seguir entrenando y a cumplir con mis objetivos. Álvaro de momento no se entera de casi nada, sólo suele ver a papá vestido con ropa ceñida y de colores de dudoso gusto.

Resumen de la semana:
Natación: 3500 metros
Bici: 7 horas
Carrera: 2h30min.

Acumulado:
Natación: 4500 metros
Bici: 17h30min
Carrera: 6h

Mañana me peso y vuelvo a apuntar.

Os he mentido

Os dije que no podía moverme ¿verdad? Os dije que estaba muerto y morío y mataaaooo... Pues no.

Álvaro vomitó a las 00:15 y hubo que ducharle, limpiar la cuna, ropa de cama, ositos, pijama... Lo metimos en la cama y volvió a vomitar a los 15 minutos. Misma operación (con cama de verdad, no con su cuna, y con papá "hasta arriba" en vez del osito). A la tercera... nos fuimos a urgencias, por que las deshidrataciones con bajones de glucosa ya nos los conocemos y no quiero más sustos. Todo esto realizado como un resorte, sin pensar, sin fatigas, sin gilipolleces. Sin pensar en el día duro de entrenamiento (para mi) y oficina.

Álvaro sólo tiene muchas flemas, nada más. Al dormir se atraganta, se ahoga un poco, se congestiona y... pataplúm. A las 3 y pico estábamos de nuevo planchando la oreja, pero no nos ha dejado pegar ojo. ¿De qué coño están hechos los niños que tienen toda la energía del mundo? Apenas ha dormido y anda por casa con su abuela de un lado para otro jugando y yo estoy que no veo las teclas (y me he levantado a las 9:30).

Por el lado deportivo:

- Dentro de un rato me voy a la piscina, a meterme unos 2000 metros de agua por las branquias.

- El señor Kelerman (el pájaro de la foto), en vez de mandarme un traductor de catalán, va y traduce la última entrada del blog. Ya le he dicho que me reventaría que lo hiciera a mano... Pero es que me jode un huevo no pillar más del 50% de lo que la gente escribe. Gracias, caballero. (Qué ganas tengo de volver a dar un paseo por Barcelona).


- Talín nos mandó ayer una tabla de ejercicos para rodillo, como si el rodillo estuviera pensado para sufrir :) Mil gracias, Talín. Ahora la trilogía del Padrino en el portátil se verá acompañada por unos sudores más intensos de lo normal.

Para acabar...

Suena en el PC "Palabras de amor", mano a mano, en castellano y catalán, entre Serrat y Ana Belén (casualidad, estoy con Ana Belén en concierto). Subo el volumen. Me pongo tontorrón, qué le voy a hacer, pero es que uno tiene su corazoncito.

Muerto, matao y morío

Este medio día he nadado 1500 metros de piscina (2º día de la temporada en el agua). Por la tarde tocaban 80 minutos de carrerita, pero mi cuerpo serrano ha dicho que ya estaba bien a la hora. Estoy fundido.

A los 20 minutos de carrera, una flema venida a más casi me hace vomitar, pero una paradita a tiempo, unas arcadas y unos esputos leves controlados han salvado la situación.

Hoy le comentaba mi plan semanal a un bípedo implume, del que no voy a dar el nombre, y el lechón me ha dicho "ya sé yo por qué no tengo entrenador". Esta semana va a ser jodidilla. De momento llevo 3 horas y media y me quedan casi 10 hasta el domingo. Espero no romperme.

Lo mejor de todo: he empleado 120 minutos de mi vida en hacer algo que me apasiona. He utilizado dos horas de mi vida para disfrutar. He puesto mi corazón por encima de 180 pulsaciones cuándo y cómo yo he querido. Me ha dado el viento en la cara volviendo a casa.

Mañana vuelvo a la piscina, a meterme 2000 metros, si el dolor que tengo en el daño, encima de la pupa, de la contractura de la agujeta, me deja sentir la espalda. Pablo, me vas a hacer un hombrecito, pero estoy sufriendo como un perro.

London Night Clubs

It's easy. Close your eyes and think about a group of people, 30-something years old, walking at 23:30h looking for the mega-fashion-fancy London night club. All of them (well, not me) are in the finance industry, really well paid (I mean WELL PAID). And, once we arrived at the entrance of the club... We have to wait because of the 'gorilla'. Tension in the faces, no jokes allowed, just wait and try to enter. The perfect line in front of the door, silence... Two minutes later (nothing happened, just time went by), the gorilla looked inside, looked at the pack and asked "how many?" "Eight" (well balanced: 4 girls and 4 boys... if there are more "machos" than ladies the deal doesn't work). "Ok, come in". We breathe again.

¿Os lo imagináis? Después de una cena estupenda en un hindú de Brick Lane, te cojes un metro hasta el culo del mundo para entrar en un garito en el que te ponen pegas para entrar por que sí. Tíos de 30 y bastantes años en la entrada, acojonados por si no les dejan entrar. Ganando pasta a saco e invirtiendo el tiempo en discotecas... Lo entiendo con 17 años, en la entrada de RKO (discoteca madrileña de los 80 donde nunca entré -yo jugaba a baloncesto y creo que fui 3 veces a discotecas-), pero a nuestra edad... Me quedo con un gin tocic en casa, con una buena conversación.

Más Londres: compras de jerseys en Jermyn Street, una brocha de afeitar (ya tenía el mango de la cuchilla, de la vez pasada) y jabón en la tienda de afeitado más increible del mundo: GEO F Trumpers www.trumpers.com Por favor, niños, visitad la web si os gusta cuidaros.



Desgraciadamente no tenían mi talla en un traje que me entró por los ojos en Hackett y que estaba muy rebajado. Eso sí, Jose me regaló el libro de Mr. Classic, con artículos del propio Hackett y que todo amante del buen vestir debería tener en casa. Gracias, amigo.


Chascarrillos...
-Ha sido la primera vez que voy a Londres y no me hago una foto bajo la estatua del Capitán Scott. ¡¡¡¡Mierda!!!!
- Por otro lado, vimos -sin buscarlo- la cabalgata de celebración del año nuevo chino camino de Covent Garden. Es el Golden Pig year... abundancia y riqueza para este año (el año del "golden pig" toca cada 65).
- El brunch del Four Seasons del domingo volvió a ser espectacular (el roast beef no tiene igual), pero creo que la próxima vez tocará algo más ligero. No nos fumamos los Davidof que compré para la ocasión por que no tuvimos tiempo, pero espero que Jose se los atice (son 5 puros) a mi salud en Hide Park en estas semanas.

Vuelvo con las pilas muy puestas. Sigo con trancazo, pero me toca todo los cojones. Vuelvo a pensar en morir en la arena, así es que, si peto, que sea con todas las consecuencias, nada de gilipolleces y de dejar las cosas a medias tintas. Vuelvo y vuelvo y vuelvo.

Ayer una hora de rodillo, aunque no tocaba, con "What it takes" en el DVD. Tengo que buscar un arreglo para el acople... No me acaba de convencer su regulación. Veremos...

Inteligencia Emocional

Hoy y mañana estoy de curso de Inteligencia Emocional. Es decir, cómo conocerse y conocer a los demás para tratar de funcionar mejor socialmente. Es un curso de empresa, así es que supone que pasas dos días más liado entre el curso y el trabajo que se te acumula.

Consecuencias del curso, del curro, del trancazo y de la madre que parió a... Semana bajo cero de entrenamiento y que coronará con un fin de semana en London viendo sastrerías y tiendas de zapatos. Eso sí, estoy muy mentalizado para la vuelta y para dar la caña que me está pidiendo el cuerpo desde hace días. La llamada de la selva...

Deprimido

Álvaro volvió a casa el viernes, con las pilas muy puestas.

Yo me pillé un trancazo la noche que dormí en el hospital, que me ha dejado en el dique seco hasta hoy.

Estoy de curro hasta las orejas y no tengo un minuto para entrenar.

El fin de semana me voy a Londres: desconectaré, pero creo que sólo podré trotar un par de horas (como mucho).

Estoy deprimido.

La Paz

Es lo que todo el mundo desea en el planeta Tierra. Es la capital de Bolivia. Y es el hospital donde llevamos al peque cuando se ponen las cosas feas.

Han vuelto a ingresarlo por una gastroenteritis aguda con hipoglucemia. Vomita y caga que es una gloria... Nada grave hasta que se vuelve serio el tema.

Nada de entreno. Hoy duerme Lorena en la habitación y mañana quiero estar a las 6:00 AM para dar el relevo, así es que me voy a la cama.

Semana fea de entrenamiento...

Manuel Vicent

Hoy ha sido un día de esos que tocan mucho los cojones. He tenido una reunión de 10 a 17 (comida incluida) de las que te erosionan demasiado el alma y te vuelven un poco más tonto. Una reunión en la que tienes tiempo para pensar qué coño quieres hacer tu vida mientras alguien habla de estrategias, ventas, mercados y oportunidades.

La comida, pesada, terminó de dinamitar mis ganas de entrenar.

Bueno, al tema. Nada de entrenamiento físico, mucho mental.

Manolo Vicent (le llamo Manolo por que para mi es de la familia, pese a que he cruzado pocas palabras -una sola vez, feria del libro mediante- con él) es esa especie de maestro que todo el mundo necesita y muy pocos lo sabemos. Desgraciadamente he encontrado en los libros de Manuel -Manolo- Vicent muchos más consejos (seguro que sin él quererlo) para ser feliz de los que han podido darme personas mucho más cercanas.

Ayer terminé de leer su último libro "Comer y beber a mi manera" y me quedo con una frase del final: "Sé prefectamente que el día en que me muera no echaré de menos los grandes acontecimientos que haya podido vivir, sino el perfume del café con las tostadas del desayuno y otras pequeñas sensaciones, por ejemplo, estirar la pierna hacia el lado fresco de la sábana en las mañanas de primavera y algunas sobremesas tan divertidas que he celebrado con los amigos."

Al final estamos condenados a disfrutar de unos pequeños placeres que no todo el mundo entiende o comparte, pero que los amigos de verdad viven como suyos propios. Yo me quedo con algunos atardeceres muy puros, la tortilla que mi abuela nunca más cocinará, el viento en la cara corriendo junto al mar y algunas sonrisas sinceras.

Gracias de corazón, Maestro.

Descanso

Lunes anodino, sin mucho que contar. Me tocaba descanso. Pensaba hacer una hora de rodillo, pero tengo cansado hasta el párpado izquierdo, así es que me he vuelto a casa después de currar para... currar un poco más (es lo que tiene poder conectarse a la ofi desde casa).

Acabo de terminar una presentación y... a la piltra a planchar la oreja.

Fin de semana

Viernes: 2 horas de bici con Zubi y Tripianista por el Carril bici desde Tres Cantos hasta Soto. Ellos, que son muy machotes, hicieron 3 kilómetros más que yo. Pero yo disfruté un rato a solas de mi respiración entrecortada y mis dolores.

Sábado: 40 minutos de carrera matutina, sufriendo como un perro por el horario, el frío y las pocas ganas. Me tocaban 2 horas de bici después, que transformé en una de rodillo por la tarde. Llamé a Zubi para decirle que se olvidara de quedar conmigo al día siguiente a las 10 con el resto de gente. Yo saldría, pero a mi hora y a mi ritno, para hacer 2 horas y media.

Domingo: 9:45 de la mañana, todos en la cama (Lorena, Álvaro y un servidor en la misma cama). Suena el teléfono. Lorena lo coje, dice algo y me lo pasa. Mis primeras palabras "Estoy dormido" (ciertas). Un tal Zubi dice no sé qué de una bici y una salida y yo respondo "estoy dormido". Pronuncia las palabras mágicas "voy a salir solo". Respuesta "jodeeeeer, dame media hora y estoy en Tres Cantos". Pues eso, Tres Cantos-Soto-Manzanares y vuelta para 2h30min. La coca-cola, los bollitos y el café autocalentable para Zubi adornaron una mañana fría y con la carretera llena de gente sobre dos ruedas que nos irían arrancando las pegatinas de las bicis si las lleváramos. Estoy cansaaaaado.

Lorena me ha regalado una funda y unos cascos para la ipod... Pero ¡¡¡para hacerla sumergible!!! Es una pijada, pero nadar con música debe ser estupendo. Cuando lleguen esos días de 200 largos me va a venir muy bien. Ya sé que hay gente que cuando entrena se concentra en entrenar pero a mi, esas horas a solas, me sirven para tener momentos para mi y mis pensamientos y la música me ayuda y me da un puntito extra. Si me dedicara al tri profesionalmente o con un objetivo "serio" hablaría en otros términos, pero la filosofía "Happy Ironman" permite estas libertades. A ver si le hago unas fotos y las cuelgo.

Hay gente que ya se mete 120 km de bici. Viven en otro planeta.

Resumen de la semana:
Natación: 1000 metros
Bici: 6h 30min
Carrera: 1h 30 min.

Acumulado:
Natación: 1000 metros
Bici: 10h 30min.
Carrera: 3h 30min.

Peso 73, 7. Grasa 20,6%

Rodrigo de Triana

Rodrigo de Triana fue el marinero que primero avistó tierra en el viaje de Colón hacia el Oeste (eso de decir que Colón iba hacia "América" es una temeridad). Imagino que el grito, después de una travesía como la que tuvieron, debió ser descomunal, potente, audible incluso por el más escondido en la bodega de La Pinta. La mezcla de felicidad, ansiedad y miedo que tendría el tal Rodrigo el día que anunció la presencia de tierra firme no es difícil de imaginar.

Ayer yo no grité TIEEEEERRAAAAAA, sino AAAAAAGUAAAAAAA. El grito era interior, que es cuando realmente las palabras suenan potentes, llenas de toda su fuerza. Que es cuando uno se llena de emoción o espanto. Cuando uno ve que ha vuelto a donde pertenece.

Después de muchas semanas (¿meses?) de sólo recibir el líquido elemento por la boca o en vertical por las mañanas y después de entrenar, por fin me tiré a la piscina. Fueron sólo 1000 metros, pero a mi me parecieron el Atlántico en su conjunto. Las junturas, cada una de las bisagras del tronco, crujían dolidas y felices. Hoy tengo resentidos los hombros. Normal. Pero me siento terriblemente contento.

La piscina del Polideportivo de Alcobendas no es como me la habían pintado. El agua lucía cristalina, con esa temperatura que no te hiela la sangre, ni te adormece con cantos de sirena. La calle central para mi solito, escoltado a cada lado por señoras que nacieron cuando todavía caían pepinos metálicos sobre algunos barrios de Madird.

Fue un auténtico placer nadar cadencioso esos 40 largos.

Por la tarde me tocaban 50 minutos de carrera a ritmo suave. Los primeros 20 fui acompañado de Pablo, marido de una forofa de algunos blogs calaveras (¿te suena Estaban?). Acostumbrado como está al pádel, su ritmo fue fuerte, pero se dió la vuelta pasados esos 20 iniciales minutos. A mi me quedaba todavía esa parte que es la que realmente educa al corazón y templa el alma. Acabé cansado, que es como uno debe acabar después de entrenar. Pero feliz de haber cumplido el objetivo del día.

En unas horas saldré con la bici. El día es gris, pero el futuro siempre es soleado.

Karbon para todos

En vista de la gente que me está pidiendo información/ayuda y de que yo quiero unas ruedas nuevas :) voy a volver a realizar un nuevo pedido al chino.

Si alguien está interesado en apuntarse al pedido (así pagamos menos en transporte e imagino que sacaremos un descuento) me puede mandar un mail a ironmandream@yahoo.es Creo que hay seguros 3 cuadros, 2 pares de ruedas, 1 sillín, 1 manillar y algunos portabotijos, pero hay que concretar.

Vuelta a hablar con Taiwan...