Pluf, pluf, plufffffff

Ayer me libré de la cena de por la noche. Bueno, digo me libré, pero no fui porque me encontraba hecho una puta mierda. De la de hoy no me salva nadie. Es la cena de toooda la empresa (unos 700 mangarranas iremos por allí) y hay que cumplir. Además, dentro del pluffff, me encuentro algo mejor.

He decidido no comprarme la bici-pepino. Voy a mejorar mi cuadro Cannondale de 1,27 kilos con las Spinergy, la transmisión completa de un Dura Ace o Ultegra de 10V y meterle un manillar profile de cabra y una tija profile fast forward para adelantar la posición del sillín. Cuando corra triatlones más cortos que un IM o un medio IM (cosa que será rara) le cambio el manillar yo mismo y la tija y... a correr.

Me parecía que gastarme 4500 euros en una burra que no sé si me van a dejar usar (mis hijos y el cardiólogo) no merecía la pena de momento. Si dentro de unos 5 años sigo bien y con tiempo para entrenar otro IM, entonces sí haré el gasto.

Mañana se materializa la venta de mi piso. Eso me va a relajar una barbaridad y me hará afrontar las cosas con otro espíritu. A partir de mañana, espero, será todo un poco más cuesta abajo.

Mañana vuelvo a entrenar, aunque sea suavemente, si no me duele la cabeza.

Bueno, ya sé que lo he dicho 831 veces, pero tengo un sueño que me caigo para atrás.

Besos & Quesos,
Dani